Mi madre, tu mamá, mi hija, mis hermanas, mis cuñadas,
mis sobrinas, mis amigas y aseguro que todas las mujeres que conozco
llevan un sol purísimo en su interior.
Aromas a jardín, diálogos en sobremesas, libres mensajeras de la vida.
Y yo queriendo atrapar el tiempo en mis manos,
para imitar como una buena discípula
el apasionante camino de la maternidad, el maquillaje,
las mil tareas que despliegan con gestos de duende
y asombrosas luchas.
Uy, pero qué bellos pies, hasta dan ganas de descalzarla para lamerle los dedos, ja.
ResponderEliminarPubliqué la tercera y última parte de "Bernardo y la fiera del riachuelo". Un beso en la frente.
la esencia con forma de guitarra...
ResponderEliminarhermoso roxi,
un beso de feriado
Qué bonito! Mujerísima!Todas esas mujeres encerrando en sí mismas la luz del sol.Un abrazo mujerísimo y soleado para ti.
ResponderEliminarQué bonito Roxana. Desde luego es un privilegio ser mujer y sentir todos esos registros y emociones que tú describes siempre tan bien. Me encantan esas reuniones familiares. Yo tengo trece sobrinos y cuatro hermanos y en esos encuentros las mujeres nos apartamos y hablamos o bailamos o reímos. O nos probamos los últimos taconazos de la tía Idoia. Y qué guapas somos todas.
ResponderEliminarBesos