Me faltaban palabras y las hallé en el libro de tus experiencias.
Buscando sonidos, encontré tu risa, la mejor cadencia.
Trepando abismos, hallé tus ojos, soláz de mi ser.
Soñando despierta, seguí tus pasos, saboreando pasión.
Al perfume de la mañana, le sumaste el incienso de tus besos.
A mi atuendo sencillo le añadiste un color singular, el de tus caricias.
En tí sueño de mi vida, se consumieron mis sentidos.
Y los delirios envolvieron nuestras sustancias, en un continuo goce y calor, perpetuando el amor.
Ciertamente hay sentidos que no caben en las palabras y que sobrepasan el lenguaje. Será la palabra en si: senti-dos, que hace que sea un sentir en dos, como el amor.
ResponderEliminarUn saludo
Wow. A flor de piel tus letras. Que siempre prevalezca el Amor.
ResponderEliminarUn abrazo!
Roxana, desde que leí tus primeras palabras estoy convencida de tu sensibilidad literaria. Como siempre un deleite seguirte.
ResponderEliminarUn abrazo
Qué mas que los sentidos para percibir tanta belleza, tanto amor, tanta vida... qué mas que estar aquí para encontrar tu delicada sensibilidad.
ResponderEliminarUn placer leerte Roxana, gracias por tus visitas y por tus cálidas palabras.
Gracias por estar!
Un gran abrazo
...es un placer leerte.
ResponderEliminarUn saludo.
Querida Roxana,
ResponderEliminarTus pemas son de ensueno.
Abrazos
Mirarndo siempre al cielo...
ResponderEliminarSaludos y un abrazo enorme.
Roxana,
ResponderEliminarMe acordaste que el amor es como una rosa, hay que rociarlo todos los dias para que este viva.
Te envio grandes abrazos y mis deseos por unas muy felices Pascuas de resureccion.
Llevo releyendo ese texto un rato y lo que más admiro es que se lo podria decir a mi mujer y también a mi hija, sin tan siquiera cambiar una coma.
ResponderEliminarBesos emocionados
Es un texto muy bonito, Roxana. Gracias. Es cierto: a veces encontramos en los demás las palabras que nos faltan.
ResponderEliminarSaludos.