miércoles, 13 de marzo de 2013

Luz en el mar.


Y la espera hizo que en mis brazos floreciera
la tarde, ella se hizo mañana, un milagro ante mis ojos de arena.
Y así la espera se hizo esperanza, eran las huellas que pisé un tiempo atrás cuando mis pies pisaban derrotas, cuando mi alma vagaba por los libros apilados en la mesita de luz.
 Nada se parece a volver a ver la luz del mar, ella tiene destellos que hacen que vuelva a creer.


visitantes