Ellos no sabían que
vivirías más aún,
no arrebataron tu vida
te inmortalizaron.
Tu alma vaga por los cerros
buscando justicia,
pero tu reclamo va más lejos
como siempre buscando
libertad e igualdad
para tu pueblo.
No lograron acallar tu voz coplera,
ahora se escucha en todo el mundo
tu poesía y las verdades
quedan escritas en el viento y la Pachamama
para cantar tu ancestral linaje.
Desde lo alto tus palabras resuenan
en ecos que vienen bajando
con paso seguro por los valles Calchaquíes
en el clamor de tu pueblo
que ahora si me permites Doña Esperanza
es mi pueblo hermano
así lo grita mi sangre.
Estimada Roxana:
ResponderEliminarEl grito de la sangre en versos rojos.
Abrazos fraternos en Amistad y Poesía verdaderas,
Frank.
Que hermoso homenaje!!!
ResponderEliminarTe felicito.
Besos.
Te dejo un beso grande Roxana y el deseo me permitas linkear tu blog con el mio,,,
ResponderEliminarAbrazos Serranianos !!!!
Que maravilla de homenaje.
ResponderEliminarBesos enormes
Preciosa manera de decir las cosas.
ResponderEliminarSaludos y una abrazo.
Bello homenaje. Es terrible lo que están haciendo con la comunidad diaguita. A veces creo que somos un país que no va a aprender nunca...
ResponderEliminarBesos
Hermosas palabras amiga que brotan de tu sensible inspiración en un merecido homenaje.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte ... muy fuerte desde México
Muy patriótico, Roxana. Ojalá muchos sintieran así, hasta en la sangre.
ResponderEliminarSaludos!