Te soñè libre, con las manos hacia el cielo, atrapando mariposas, riendo y tambien llorando, te soñe como eres hoy.
Con los ojos sin mentira, te soñé viviendo de a poco, paso a paso.
La aurora te contagió sus tempraneros colores, el rocío su húmedo adiós, y de mi tal vez heredes la melancólica forma de dibujar las letras y ese andar buscando por los caminos el invierno que pasó, o tal vez el verano en un viejo pais...